El hombre de 47 años que fue detenido este domingo tras matar con un cuchillo de cocina a su hijo de 11 años en una vivienda de la localidad valenciana de Sueca será puesto mañana por la mañana a disposición del juez, según ha informado la Guardia Civil.
El pequeño Jordi, que acababa de cumplir 11 años, se encontraba en el domicilio de su padre a pesar de que éste tenía una orden de alejamiento respecto de la madre, que era la responsable de la custodia del menor, hijo único de la pareja.
Un fallo del sistema
Por su parte, la presidenta del Observatorio contra la Violencia Doméstica y de Género, Ángeles Carmona, ha reconocido este lunes que el asesinato de un niño de 11 años en Sueca (Valencia) a manos de su padre es un «fallo flagrante» del sistema, que «no puede volver a ocurrir».
El asesinato del menor es el primer caso de violencia vicaria registrado este 2022, y la Delegación del Gobierno contra la Violencia de Género ha confirmado que existían denuncias previas por violencia machista contra el presunto agresor.
Los vecinos se vuelcan con los familiares
Docenas de personas han secundado este lunes en Cullera, municipio donde reside la madre del menor, la concentración silenciosa de duelo y repulsa por el asesinato de Jordi, de 11 años, a manos supuestamente de su padre, celebrada ante el Ayuntamiento con familiares y amigos de la familia.
A las ocho de la tarde y convocada por el Ayuntamiento, la concentración ha estado cargada de emoción y el silencio se ha roto con un aplauso unánime cuando una gran pancarta morada condenando la violencia machista se ha elevado hasta los balcones del edificio consistorial para quedar allí colgada.