Un estudio del Instituto de Salud Global de Barcelona afirma que la mejora de la calidad del aire por la reducción del dióxido de nitrógeno (NO2) durante la primera ola de la covid-19 evitó 15 muertes prematuras en la Comunitat Valenciana.
Según los datos publicados por el estudio, el confinamiento pudo evitar 10 muertes en Valencia, 3 en Alicante y 2 en Castellón. La cifra asciende hasta las 170 muertes en España.
Esta investigación ha sido impulsada por la Fundación Caixa, y contempló por primera vez el impacto de la reducción de la contaminación atmosférica por el confinamiento en la mortalidad de 47 capitales de provincia de España.